El adiestramiento canino es una disciplina que no está definida con claridad, aunque la practican millones de personas en el mundo. La dificultad para definir con precisión lo que es el adiestramiento de perros constituye una de las razones por las que muchos propietarios de perros no entienden la necesidad de adiestrar a sus mascotas.
Algunas personas piensan que el adiestramiento canino consiste en robotizar a los perros mediante alguna técnica mística de programación mental. Otras personas piensan que solamente es necesario el adiestramiento especializado para perros de trabajo real y deportivos. Sólo algunas personas consideran que es necesario adiestrar a perros mascota, especialmente a los perros pequeños como los chihuahua o los Yorkshire terrier.
Esa dificultad para precisar lo que es el adiestramiento canino también es una de las razones, aunque no la única, por las que existen tantas discrepancias entre adiestradores de perros.
Adiestramiento canino es el proceso mediante el cual una persona logra que un perro aprenda y adquiera destreza en algo, y mantenga esa destreza.
De acuerdo con esta definición, el adiestramiento canino necesita la participación de una persona, ya sea directa o indirectamente. Por tanto, lo que tu perro aprenda sin tu intervención no forma parte del adiestramiento, aunque sí forme parte de su comportamiento.Nota también que la definición de adiestramiento canino exige la adquisición y mantenimiento de destrezas. Es decir que no basta con enseñarle algo nuevo a tu perro, sino que es necesario mantener y perfeccionar ese aprendizaje para poder decir que tu perro está adiestrado.
Puesto que las conductas adiestradas necesitan mantenimiento, el adiestramiento de perros es una actividad de por vida. No es posible decir "mi perro está entrenado" y no practicar nuca más. Sin embargo, una vez que las conductas adiestradas se convierten en hábitos, el mantenimiento es fácil y no requiere mucho esfuerzo.
Ya sea que quieras adiestrar a tu perro sólo para que se comporte adecuadamente en casa, para competir en deportes caninos o para convertirlo en especialista en alguna actividad canina, los artículos que encontrarás aquí te ayudarán a comprender las verdades y los mitos del adiestramiento canino.
El adiestramiento canino consiste en la modificación de conductas del perro a través del aprendizaje guiado. Por tanto, los principios del adiestramiento canino son los mismos principios propuestos por las teorías del aprendizaje, sólo que se aplican de una manera específica.
Aunque existen muchos entrenadores que tienen éxito sin conocer estos principios, conocerlos te ayudará a entrenar mejor y con más eficiencia. Ya sea que te interese convertirte en un adiestrador profesional de perro, que ya seas uno o que solamente quieras entrenar a tu perro en el nivel más básico, los principios del adiestramiento te darán una enorme ventaja sobre quienes no tienen este conocimiento.
La obediencia canina consiste en adiestrar perros para que hagan ciertos ejercicios cuando se les da la señal u orden correspondiente. A veces se confunde obediencia canina con adiestramiento canino porque la primera es la forma más común de adiestramiento. Sin embargo, no son sinónimos, sino que la obediencia es una parte del adiestramiento.
En los artículos que encontrarás aquí, aprenderás cómo entrenar a tu perro o cachorro para realizar diferentes ejercicios de obediencia. Algunos de los ejercicios de obediencia más comunes son: sentado, echado, acudir al llamado y caminar sin jalar la correa.
Obediencia canina para la vida cotidiana
Existen diferentes exigencias para el adiestramiento en obediencia según cuál es el objetivo que se persigue. Es decir que el adiestramiento en obediencia canina será diferente si se entrenan perros que realizan trabajos en la vida real (perros de búsqueda y rescate, perros de policía, etc.), perros deportivos (schutzhund, agility, etc.) o perros mascota.
La obediencia que se entrena en perros de trabajo real y en perros deportivos cuenta con algunos ejercicios que no son útiles en la vida cotidiana de un perro mascota. Por ejemplo, el ejercicio de caminar junto al guía en schutzhund y en obediencia deportiva exige, entre otras cosas, que el perro vaya con el hombro derecho a la altura de la pierna izquierda de su guía. Ese ejercicio resulta muy vistoso, pero es inútil para sacar a pasear al perro porque no le da mucha libertad. Para perros mascota, es mejor entrenar el ejercicio de caminar sin jalar la correa, que permite al perro disfrutar los paseos con cierta libertad.
Aquí encontrarás los ejercicios de obediencia canina que son útiles para la vida cotidiana de un perro mascota. Saber cómo se entrenan también te ayudará si quieres participar en deportes caninos, pero en ese caso es probable que necesites aumentar algunos criterios de adiestramiento relacionados con la precisión, velocidad y otras exigencias deportivas.
Existen muchas maneras válidas de entrenar los ejercicios de obediencia canina, pero las técnicas que encontrarás aquí corresponden al adiestramiento con clicker porque es sencillo, eficaz y evita la violencia contra el perro. Por la misma razón, puedes usar estas técnicas con cachorros al igual que con perros adultos de cualquier edad y raza. Sólo ten en cuenta que los cachorros no tienen la misma capacidad de atención que los adultos, y que los más jóvenes no tienen buena coordinación.
Educar a tu perro para ir al baño no es algo difícil pero necesitarás tiempo, paciencia y estar muy alerta. Existen tres maneras efectivas para enseñarle a tu perro a no ensuciar la casa: adiestramiento con papel, adiestramiento activo y adiestramiento con jaula.
Aunque cada uno de esos métodos se enfoca en situaciones particulares, lo más probable es que necesites combinarlos para tener menos contratiempos.
Antes de empezar la educación higiénica de tu perro
Antes de empezar a enseñarle a tu perro a no ensuciar la casa, tienes que considerar los siguientes factores:
1. Examen veterinario y desparasitación
Algunos problemas de salud pueden dificultar o incluso impedir que tengas éxito al educar a tu perro en las necesidades higiénicas.
Asegúrate que tu cachorro no tenga enfermedades directamente relacionadas con la defecación o la micción. Enfermedades como la cistitis, infecciones urinarias o diarrea pueden impedir la educación higiénica de tu perro. Además, algunos parásitos internos (gusanos) pueden provocar defecación irregular.
Por tanto, antes que nada lleva a tu perro al veterinario para que le haga una revisión completa. Coméntale al veterinario que quieres saber si tu perro tiene alguna enfermedad que pueda afectar la educación higiénica.
2. Horario de comidas
Si tu perro come a cualquier hora, también hará sus necesidades a cualquier hora. Por eso es importante que tenga un horario fijo de comidas.
Cuando le des la comida a tu perro, déjasela en el plato por media hora aproximadamente. Después de ese tiempo, retira el plato.
Como norma general, un cachorro tiene que comer entre cuatro y cinco veces por día, mientras que un perro adulto tiene que comer dos veces al día. Sin embargo, es una buena idea que consultes con el veterinario para que te ayude a establecer la cantidad y el número de comidas diarias para tu perro.
Ten en cuenta que la comida para perros que viene en lata es húmeda y puede aflojar el estómago de tu cachorro.
3. Identifica las áreas en que tu perro puede hacer sus necesidades
Es bueno que tengas claro dónde permitirás que tu perro haga sus necesidades y dónde no. Identifica esas áreas y no permitas que tu perro esté en las "zonas no permitidas" sin supervisión.
Si tu cachorro todavía no puede salir a la calle porque no tiene completas las vacunas, tendrás que cubrir el suelo del cuarto a prueba de cachorros con papel periódico para que ésa sea una "zona permitida".
Es importante que las "zonas permitidas" tengan una superficie diferente que la de las "zonas no permitidas". Por ejemplo, la lavandería tiene un piso de azulejo ("zona permitida"), mientras que los cuartos tienen parquet y alfombras ("zonas no permitidas").
4. Lleva un registro diario de los desechos de tu perro.
Durante los primeros días de la educación higiénica tienes que registrar las horas en que tu perro hace pis y caca. Aunque esto es un poco molesto, es importante para que sepas cuándo es más probable que vaya a hacer algo.
Entonces, podrás llevar a tu perro a una "zona permitida" media hora antes de su hora de hacer pis o caca. Así, te resultará más fácil evitar los accidentes sobre la alfombra. Esto también te servirá para el adiestramiento activo y para el adiestramiento con jaula.
5. Retira el recipiente de agua antes de ir a dormir.
Si tu perro no duerme en el cuarto a prueba de cachorros, tendrás que evitar que tome líquidos después de una hora determinada. Puedes retirar el recipiente de agua a las nueve de la noche o un poco más tarde.
Sin embargo, déjale el recipiente con agua toda la noche si hace mucho calor en el lugar en que tu perro duerme o si él:
■duerme en el cuarto a prueba de cachorros
■está sediento
■tiene algún requerimiento especial de salud (por ejemplo, está deshidratado)
■tiene diarrea
6. Consigue un neutralizante de olores.
Sin importar qué métodos uses para educar a tu cachorro, en algún momento tendrás que limpiar algún lugar de tu casa. Así que mejor consigue un producto que neutralice el olor de la orina. Puedes encontrar muchos productos para esto en las tiendas para mascotas.
Asegúrate que el producto que compras no tenga amoníaco porque no te servirá.
Aspectos importantes sobre la educación higiénica del cachorro y el perro adulto
No esperes que tu cachorro esté completamente educado en los hábitos higiénicos hasta que cumpla por lo menos seis meses. Hasta esa edad, los perros no tienen control total sobre su vejiga urinaria.
Si tu perro ya es adulto, podrá controlar mejor su vejiga, pero tal vez ya haya aprendido que puede hacer sus necesidades donde le da la gana. En ese caso, tendrás que reeducarlo.